Jornada VI
¿Por qué les gusta el fútbol?. ¿Lo han pensado alguna vez?. Hay muchas razones pero yo creo adivinar cual es la principal, al menos para mí.
Decía Pedro Ruiz que su espectáculo teatral (alguno de los muchos que ha hecho no recuerdo cual exactamente) era mejor que ir a un partido de fútbol porque al menos en su espectáculo la gente sabía de antemano que se iba a divertir (sic) pero en el fútbol a lo mejor terminaba por ver un partido malo, su equipo perdía y a lo mejor hasta se ponía a llover.
Estoy de acuerdo con ese razonamiento aunque yo le daría la vuelta. Precisamente la incertidumbre es lo que hace grande al fútbol. Once contra once y noventa minutos por delante. Cualquier cosa (excepto que la diferencia entre los dos equipos sea abismal y a veces ni eso) puede suceder.
Y si esos dos equipos se llaman Barcelona y Atlético de Madrid esa incertidumbre se convierte en certeza. Certeza de que habrá incertidumbre. Es cuando empieza la magia, cuando se entra en un territorio al margen de cualquier previsión, cuando las tácticas y la preparación se va al carajo y cuando sólo queda locura. Hoy la locura nos ha favorecido, otras veces ha favorecido a los rojiblancos. Lo importante es que siempre pasa algo, siempre sabemos que va a pasar algo y eso en el fútbol de hoy ya es algo, para mí es suficiente. Incluso prefiero perder así que ganar como ganan algunos.
El Barça se puso por delante a los tres minutos. Antes de que pudiera saborear la ventaja de jugar con marcador a favor (después de tres partidos sin conocer esa sensación) vino el segundo y luego el tercero. Ocho minutos y tres goles. Posiblemente los tres goles vinieron por una tremenda falta de concentración del Atlético de Madrid en defensa pero así son los partidos locos. De repente cuando quedaba casi un noventa por ciento de tiempo por jugar todo parecía perdido.
El gol de Maxi Rodríguez en la única ocasión de todo el partido (que una vez más acabó en gol y esto es algo que sigue preocupando) puso una sombra de duda -¿nos acordamos de aquella vez que íbamos ganando 0-3 en el Vicente Calderón al descanso verdad?- pero fue un espejismo. El Barça había vuelto a los buenos tiempos en el que sus imprudencias defensivas se contrarrestaban con un imparable capacidad goleadora. Para confirmarlo, cinco minutos más tarde, el mejor gol del partido con un pase en profundidad de Xavi (esta vez más media punta que nunca, no hizo falta preocuparse por la defensa en el centro de campo porque no había ningún rojiblanco allí que pudiera inquietar) a Etoo que volvió a marcar uno de sus grandes goles de delantero centro, uno de esos goles de tres segundos. Luego vino el gol de Gudjonsen tras una gran jugada de Iniesta y ahí acabo todo.
Cinco goles en la primera parte que pudieron ser catorce (incluyendo un jugadón de Messi que fue una autentica lastima que no terminara en el fondo de la red). El Atlético de Madrid destruido tras el mazazo de los primeros diez minutos, incapaz de reaccionar, perdiendo todos los balones, sin presencia en el centro de campo y tratando ya únicamente de evitar que la debacle fuera mayor.
El duelo Messi-Agüero no fue tal porque el Kun no tuvo ninguna oportunidad. No estaba bien físicamente y además atacaba más solo que la una, ni siquiera un genio puede hacer nada en esas condiciones.
La segunda parte fue un relajo para todos los cules, algo que no teníamos desde la paliza al Sporting. Ya era hora. Se trataba de dosificar fuerzas y dar entrada a los otros delanteros. Henry tuvo su gol tras una gran jugada al primer toque (otra vez como en los viejos tiempos) y sólo faltó que marcaran Iniesta y Bojan para que la noche fuera perfecta.
Una gran inyección de moral, para el equipo y para Guardiola y una demostración de que creando ocasiones y condiciones los goles terminan por llegar. No se puede evaluar el centro de campo ni la defensa porque de hecho apenas tuvieron trabajo pero creo que el trío atacante que se vio hoy es el que debe ser titular sin ninguna duda.
Y ya está. Mejor no decir nada más, la locura no es para analizarla sino para disfrutarla o para sufrirla. Ha sido un placer.
8 comentarios:
Ains, qué bien voy a dormir esta noche.
Lo malo es que he tenido que seguir el partido a trozos por la tele de un pub y a trozos por la radio; tendré que bajármelo luego para poder verlo entero y disfrutar los goles que me he perdido.
He estado hasta las 4 de la mañana en el Festival de Sitges, viendo un musical gore de ciencia ficción con Paris Hilton. Dicho así suena incluso más raro que el que Gudjohnsen vaya camino de ser pichichi.
Bajate la primera parte. Y supongo que habra crónica de Sitges en tu casa
Lo del placer es un decir.
Yo, tal y como marcó el tercero el Barcelona apagué la tele y me fui a la cama con Pérez Galdós. Mejor que ver a los míos haciendo el ridículo y el gilipollas leer como hicieron el ridículo y el gilipollas las Armadas española y francesa en Trafalgar. Me jode menos.
Esta mañana me he levantado y he mirado en el teletexto. Sorprendentemente sólo metisteis seis. Os sentiríais navideños. Nosotros milagrosamente metimos uno. Sería en propia meta.
Hoy es de esos días en los que en mi casa está prohibida la televisión, la radio y los periódicos. Tu entrada la he ojeado en diagonal por si me citabas. No, no me gusta el fútbol. Cuando juega el Atleti no me gusta el fútbol salvo cuando el fútbol lo hacemos nosotros.
Y un año más en el mes de octubre con la ilusión por los suelos (no es perder, es que te demuestren que eres una puta mierda) y otra temporada arrastrándonos y jugando finales, que es lo nuestro.
Y cuando se me pase el disgusto, de aquí a veinte años, trataré el tema del uniforme con el que el Atleti saltó al campo.
¡Hombre poca fé! Te aseguro que cuando marcó Maxi sentí un desasosiego extraño en el trasero. Pero la cosa quedó en nada.
Yo también recuerdo haber dejado de ver un Madrid -Barça cuando ellos marcaron el tercero (fue el 5-0 del año en que empezó la decadencia de Cruyff).
¿Con eso del uniforme te refieres a los calzones rojos?
El uniforme del Atlético de Madrid, y esto se lo digo a la directiva, es camiseta rojiblanca, pantalón azul y medias rojiblancas.
El uniforme es uno e indivisible. Si se confunde la equipación, pues jugamos de lila, de fucsia o de gris marengo. Nunca he visto al Madrid combinar su camiseta blanca con otros colores. Nunca he visto al Barcelona combinar la camiseta azulgrana.
Ayer saltamos al campo (decir que jugamos sería grotesco) con pantalón rojo y medias azules. Los símbolos tienen su importancia. Si nosotros mismos nos mofamos de ellos, pues se empieza por ahí y se termina en segunda. Sonará muy tonto, pero los que nos hicimos del Atleti viendo jugar a Gárate, a Luis, a Ufarte sintiendo orgullo de esa camiseta pues nos toca los cojones ver a un equipo que es el nuestro faltándonos el respeto.
Por cierto, enhorabuena. Con la boca pequeña, claro.
Bueno ya sabes, hay que vender uniformes todos los años. No te extrañe que haya más cambios en las sucesivas temporadas.
Pues a mí me jodieron el sábado, estábamos en casa celebrando mi cumpleaños y el plan era ver el partido después de cenar.
Pusimos la tele con diez minutos de retraso y 3-0. Solo espero que contra nosotros estén igual de desastrosos y se dediquen a marcar a los delanteros con la vista.
Como siempre que el Madrid es por el Plus no he visto nada, así que no puedo opinar.
Yo tampoco lo vi porque estaba viendo una pelicula de Ozu. Lo que sé es que el empate nos permite arañar dos puntiviris con lo cual ha sido un fin de semana casi perfecto
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