Rey de Reyes

Nuevo órdago de Pep que parecía insistir, con la alineación de este partido, en que es imprescindible contar con dos equipos titulares (o un equipo titular y un equipo suplente de lujo) para afrontar todas las competiciones de la temporada. En caso de que la cosa no hubiera salido bien posiblemente sus detractores (que los tiene como todo el mundo) hubieran sacado por primera vez la cabeza del agujero donde la tienen metida.

Lo cierto es que al equipo que jugó hoy en el Vicente Calderón sin dos de sus pilares básicos en defensa (Puyol) y en el centro de campo (Xavi) y con Messi acompañado esta vez de Iniesta y Bojan. Lo cierto es que el mayor interés de este partido (ya he dicho anteriormente que no soy un gran fan de la Copa del Rey) era ver como funcionaba ese Plan B de Guardiola.

Pero tampoco ha habido ocasión de someter a dicho equipo alternativo a una verdadera prueba de fuego porque no ha habido partido. Aparte de algunos zarpazos nada más empezar el Atlético de Madrid se pasó la primera parte enredado y sofocado por la presión barcelonista en todo el campo que prácticamente no le ha permitido hacer nada a derechas aparte de perder el tiempo con un juego bronco que causaba más daño a sus propios intereses que a las canillas de los culés.

Este esquema se acentuó más aun a raíz del la gran combinación entre Messi y Alves que se tradujo en el primer gol. A partir de ahí una cierta tranquilidad ante la no reacción del Atlético y una ocasión para analizar el juego del equipo. Excelente Piqué en defensa y mágico Alves que es una verdadera lanzada en el costado enemigo. El centro de campo más trabajador que creativo aunque Keita parece reivindicarse cada vez más como un refuerzo para la denominada “segunda línea” y encima es de los pocos que rematan bien de cabeza. Iniesta tuvo una primera parte muy apagada debido a que toda la diversión estaba en la otra banda con el juego incisivo de Messi y Alves.

En cuanto a los tres suplentes habituales decir que justificaron su condición. Pinto hizo una parada de mérito pero se mostró nervioso e inseguro, lo peor que puede ser un portero. Lo mismo cabría decir de Cáceres que tampoco da sensación de seguridad y además falló en el gol. En cuanto a Bojan decir que su actuación no sólo fue irrelevante sino que incluso dio la impresión de ser también indolente. No es para tirar a la basura al serbiocatalan y más cuando puede ser necesario en caso de alguna baja por lesión en la delantera pero ya son muchas las voces barcelonistas que sugieren una futura cesión que podría venirle bien.

De todos modos, como digo, hoy no habría problema porque el partido estaba muy controlado y más aun cuando Heitinga (alias la madre) interrumpió una nueva jugada entre Alves y Messi con un penalti y la consiguiente expulsión (quizás demasiado rigurosa). Además Iniesta estaba empezando a caer hacia el centro donde empezó a tocar mejor la pelota y a combinar de forma más afortunada con Messi. El gol del checo impronunciable sólo fue un espejismo porque una nueva genialidad de la pulga puso de acuerdo incluso a la afición colchonera que lo vitoreó y que por otro lado abucheó de forma injusta en mi opinión a Aguirre. Supongo que algo tendría que ver la renuencia del entrenador mexicano a alinear al Kun Agüero incluso antes de esa amigdalitis que posteriormente se adujo como excusa. Una decisión polémica pero defendible, igual que la de Guardiola aunque el Atlético echó en falta ese punto de genialidad que podría haberle sacado de su estancamiento y que nosotros sí teníamos.