jueves, 23 de agosto de 2012

Super Unknown






Mañana reflexionamos que estoy muy caliente y ya hace bastante calor

 
Salvo que se trate de un amistoso (y eso no es posible hoy en día) un Madrid vs. Barça siempre es un partido tenso, naturalmente la tensión es variable dependiendo de las circunstancias y las de ayer tenían su propia cuota de interés. Se trataba del estreno del nuevo Barça de Tito Vilanova en su primer gran partido tras el entrenamiento duro que fue el enfrentamiento contra la Real Sociedad. Era además la primera vez que se veían las caras Vilanova y Mourinho (como máximos responsables de sus respectivos equipos) después de que hace más o menos un año se llegara al punto de mayor crispación entre las relaciones de ambos clubes y por contraste el momento más bajo en la carrera personal del entrenador portugués.

El partido en líneas generales me ha parecido bueno pero muy mejorable por más que los defectos del equipo puedan achacarse a una falta de rodaje que en buena lógica iría disminuyendo a medida que avanza la temporada.

El Barça saltó al campo como si no hubiese pasado nada desde la última vez que lo hizo en competición oficial, volvió a faltar Puyol que volvió a ser sustituido por “Machete” y la banda izquierda la ocupó Adriano, delante Pedrito en lugar de Villa. No jugaron los hombres en teoría ya recuperados ni tampoco el flamante fichaje Jordi Alba, supongo que habría buenos motivos para estas ausencias aunque lo de Alba es algo más difícil de entender.

Los defectos antes mencionados se manifestaron sobre todo en los primeros cuarenta y cinco minutos donde pese al dominio del balón (elegantemente cedido por el Madrid envuelto en un lazo de regalo) el equipo se mostró incapaz de atravesar la dura (se jugó con bastante contundencia aunque por fortuna sin ninguna entrada violenta) barrera defensiva madridista. Pedro y Alexis estaban ahogados en banda (Alves creó más peligro por la derecha de lo que lo hizo el chileno que fue secado por Cointreau en todo momento) y Messi e Iniesta estuvieron fallones y lejos de su mejor forma.

El Madrid estaba una vez más especulando con el resultado (una actitud que no me sorprende de su entrenador pero que me sigue sorprendiendo de su afición),  pensando ya en el encuentro de vuelta y sabiendo que la única forma de fracaso era no marcar un gol, un hecho que le concedía al menos tres resultados que oscilaban entre lo excelente y lo aceptable (0-1, 1-1 y 2-1), así pues como hemos dicho cedió terreno al equipo local enquistándose atrás y jugando en largo a buscar un contragolpe que nunca se produjo por sus propios deméritos y porque la pareja de centrales ayer estuvo soberbia. El equipo blanco se dio por satisfecho con mantener el tipo en la primera parte pero era consciente de que tenía que buscar su gol en la segunda.  

Y pareció que lo había conseguido cuando a los diez minutos Cristiano Ronaldo (que no había hecho nada este ese momento y que no volvería a hacer nada después) remató a gol en un saque de esquina. Nunca sabremos lo que hubiera pasado si el Madrid hubiera disfrutado de esa ventaja más tiempo porque afortunadamente Mascherano recuperó su versión de medio centro y sirvió un pase que (en posible fuera de juego todo hay que decirlo) Pedrito recogió de forma magistral y remató a puerta en un ejercicio clásico de verticalidad cumpliendo así su papel en este partido, porque a jugadores como él sólo se les pide que marquen.

Consciente el Barça de que tenía que obtener un mejor resultado se volcó en el ataque mientras que el Madrid iba sumando elementos frescos en su propia delantera (Higuaín y sobre todo Di María que se mostró con mucho el jugador más peligroso de los merengues), pero fue el equipo azulgrana el que ganó la partida en ese momento del encuentro cuando en poco tiempo consiguió marcar dos goles en los que Iniesta (que repito que hasta ese momento había estado muy flojo) tuvo una participación decisiva (provocó el indiscutible penalty primero y cedió de forma antológica a Xavi después).

El equipo ganaba 3-1 que era ya un resultado que garantizaba media Super Copa pero siguió atacando fiel a su filosofía, otra jugada de combinación terminó con una clara ocasión de Messi y el contraataque subsiguiente provocó un fallo lamentable de Valdés. De un 4-1 definitivo a un 3-2 inquietante. Grandeza y miseria de los goles con valor doble en campo contrario. El partido concluyó sin más incidencias que señalar que los cambios introducidos por Tito resultaron irrelevantes.

Podríamos zanjar el tema del último gol con el comentario de que un fallo lo tiene cualquiera, lo que ha ocurrido sería una “valdesina” de las que nuestro guardameta comete en al menos un par de ocasiones cada temporada. Sin embargo creo más bien que nuestra filosofía de salir con el balón controlado y evitar el pelotazo en lo posible tiene, aparte de unos beneficios que saltan a la vista, un subproducto en forma de goles tontos como el de ayer que no hay más remedio que aceptar.

Fin del primer clásico de la temporada y ambos equipos pueden reclamar cierta satisfacción. El Barça gana al Real Madrid una vez más siendo fiel a su estilo y por más que la valdesina le haya amargado el final del partido sigue teniendo la inmensa ventaja de saltar al campo el próximo miércoles con la condición de ganador a priori. El Madrid por su parte saca un rendimiento extraordinario de los fallos del Barcelona y mantiene sus opciones en todo lo alto algo cuando posiblemente merecía haber perdido ya la final. En menos de una semana el desenlace del primer drama del curso.

3 comentarios:

Blogger Deckard ha dicho...

A mi me parece que está bien no pitar ese fuera de juego. Lo que nadie dice de la jugada es que es el enésimo error de Coentrao, el ve la línea, ve el pase y sale corriendo en vez de dejar a Pedro solo un metro en fuera de juego. Este tipo se pasa la vida rompiendo el fuera de juego.

Marcelo la caga de vez en cuando en defensa pero en ataque puede montar un lío. Coentrao el único lío es que se le enreden las piernas.

Ayer se vio que CR está todavía de pretenporada. Subía Coentrao y se quedaba a defender, cosa que no ha hecho nunca. Kedhira vuelve a ser el hombre invisible, nada que ver con la Eurocopa. Veremos la vuelta, puede pasar cualquier cosa, como se vio en la locura de segunda parte de ayer.

25 de agosto de 2012, 3:50  
Blogger SisterBoy ha dicho...

Pues Cointreau se bastó y sobró para secar a Alexis, eso es lo que me fastidia.

25 de agosto de 2012, 4:12  
Blogger Deckard ha dicho...

Lo que no dice mucho de Alexis :)

25 de agosto de 2012, 6:22  

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio