domingo, 4 de marzo de 2012

Jornada XXV



De todos los partidos en los que el Barça podría prescindir de Messi posiblemente un encuentro en casa frente al penúltimo clasificado sería la opción más aceptable. Si al final no se hubiese conseguido la victoria no hubiese sido admisible mencionar entre las causas de dicho desenlace la ausencia del astro argentino.

A la ausencia de Messi se unió la de Busquets, el mediocentro canterano fue adecuadamente sustituido por Keita que mostró un tremendo derroche físico recuperando balones y tratando de ayudar en la distribución del juego, además marcó un golazo. Con la delantera pasó algo diferente, el trío atacante estaba compuesto por Cesc, Cuenca y Pedro, al primero se le aplicó un marcaje individual que lo dejó más seco que un hueso en el Desierto de Gobi, el segundo apenas pudo aportar un par de pases sin destinatario y en cuanto a Pedro…lamento mucho decir que está muy lejos del impresionante nivel demostrado en temporadas anteriores, las lesiones y la presión por la llegada de nuevos fichajes junto con la progresión de otras figuras de la cantera le está pasando factura, mucho me temo que todo esto terminará en cesión.

Con todas estas circunstancias el dominio del Barça (desprejuiciadamente cedido por el Sporting) apenas se materializó en oportunidades, con el equipo empeñado en lanzar pases interiores e intentar paredes imposibles y con las bandas totalmente cerradas. Con Xavi aun en modo de bajo consumo (y aun así sigue siendo imprescindible) fue Iniesta el encargado una vez más de echarse al equipo a los lomos y tratar de buscar ese desequilibrio que el equipo estaba necesitando. Por fin al filo del descanso (y cuando ya el aficionado tenía más en la cabeza cuales era los cambios adecuados) la insistencia del equipo en el juego de combinación dio sus frutos y una internada por la izquierda de Adriano terminó en cesión a Iniesta que remató a placer.

Podía haber sido uno de esos partidos en los que al Barça le cuesta abrir el marcador pero que luego acaba resolviendo con comodidad pero no hubo tal. Nada más empezar el segundo tiempo sucedió lo inconcebible, en apenas cuatro minutos el equipo se vio con un hombre menos y con el encuentro empatado. No había opción a seguir reservando jugadores con vistas al encuentro de vuelta de la Champions, puede que no sea muy práctico seguir luchando por esta liga pero estamos en un deporte donde lo emocional lo es todo, y batallar por una competición perdida es algo que exige la afición. Sabiendo que una derrota era lo mismo que un empate Pep puso toda la carne en el asador sacando a Tello y Alexis por los inoperantes Cesc y Pedro cambiando a un claro esquema 3-3-3 sin tratar de cubrir la vacante en defensa. El equipo se lanzó a tumba abierta mejorando mucho en el aspecto ofensivo (gracias entre otras cosas a la profundidad de Tello, un jugador que estimo que debería ser titular en perjuicio de Cuenca) aunque al final fue un hombre de la segunda línea como Keita el que transformó ese gran gol del que ya hemos hablado. Con el marcador nuevamente a favor Guardiola sacó a Cuenca por Puyol para apuntalar la defensa, el 3 a 1 de Xavi (después de un gran pase de Iniesta) puso por fin la anhelada tranquilidad que volvió a romperse minutos más tarde con la nueva lesión de Alexis.

El equipo y la afición celebraron un triunfo que repetimos tiene más de emocional que de práctico y que deja al equipo nuevamente en cuadro tras las bajas de Pique y Alexis. Al menos Messi descansó.

Como este blog es devoto de Guardiola, suele seguir sus enseñanzas siempre que puede, incluido el no hablar de los árbitros. Pero lo de ayer me ha parecido lo bastante grave como para hacer un comentario. La jugada clave fue la expulsión de Piqué desde luego, puede ser discutible si el delantero sportinguista tenía el balón controlado cuando se produjo el incidente y si en realidad fue una falta provocada por dicho jugador, pero al menos en este lance Velasco Carballo tiene el beneficio de la duda. Lo grave fue en cambio los tres penaltis no pitados al equipo local, es posible incluso –estirando al máximo la buena fe- que no viera el empujón a Keita y unas manos muy claras en el área asturiana (por más que su trabajo sea precisamente ver estas jugadas, o al menos sus asistentes sí deberían verlas), pero el clarísimo derribo a Alves en la primera parte que tuvo lugar en sus mismas narices no tiene ninguna disculpa, no quiso o no se atrevió a pitarlo. Pero así y todo considero prudente que la actitud del club siga siendo el silencio de Pep o cuanto menos los esporádicos balbuceos de Rossell. Las declaraciones de Piqué lo único que hacen es perjudicarnos.

Nos vemos entresemana en Champions.

4 comentarios:

Blogger El Impenitente ha dicho...

¿Sufres mucho con Pedro?

Ya veo que, como Guardiola, también hablas de los árbitros.

Para igualar esta Liga tendríais que jugar el setenta por cien de los partidos con diez. Y el caso es que sacaríais los mismos puntos.

Cuando llegó el Cholo leí por ahí (a un argentino) que los equipos de Simeone eran empatadores. De los últimos cinco hemos empatado cuatro y hemos perdido uno. Y el caso es que la Champions la seguimos teniendo a cuatro o cinco puntos. A ver si espabilamos un poco, que más fácil no puede ser.

4 de marzo de 2012, 11:54  
Blogger SisterBoy ha dicho...

Ustedes ya saben a quien tienen que ganar.

4 de marzo de 2012, 11:57  
Blogger Deckard ha dicho...

Una semana más que descontamos. El partido del Madrid tuvo poca historia.

5 de marzo de 2012, 6:55  
Blogger SisterBoy ha dicho...

Eso se sabía ya antes de empezar :D

5 de marzo de 2012, 8:27  

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